viernes, 19 de diciembre de 2014

No todas las cicatrices estan a simple vista

La violencia de género y sus consecuencias en la salud


Cada día son más los casos que conocemos en relación con la violencia de género. Cada vez son más las denuncias y los pedidos de ayuda de muchas mujeres que buscan salir de este calvario que les toca vivir. En general, uno cuando escucha “violencia de género” lo primero en que piensa es en una mujer golpeada, marcada, con moretones o heridas de algún tipo… y si bien esto puede ocurrir, no es la única secuela que puede existir.
La definición que hoy se maneja a nivel mundial de violencia contra la mujer es la siguiente: "se considera violencia de género a todo acto que pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada". Como explica esta definición de la OMS, el maltrato no solo tiene que ver con la violencia física, sino que también tiene que ver con la violencia psicológica que muchas veces deja peores consecuencias que un golpe.
Los traumas psicológicos que puede generar el maltrato tienen una repercusión tal en la vida de esas mujeres que las afecta por completo. Las consecuencias pueden ir desde la depresión hasta el suicidio. Se abre un gran abanico de problemas, que no van afectar a todas por igual ya que no todas las personalidades reaccionan de la misma manera. Hay estudios que comprueban que un 72% de las victimas sufren alguna de todas las consecuencias posibles.

  La problemática desde un ángulo más cercano

Para tener una voz autorizada en el tema, nos pusimos en contactos con la directora y la encargada de un centro de ayuda para mujeres afectadas por la violencia de género. Llegamos a estas mujeres por medio del la Fundación Vida Sin Violencia y pudimos conversar con ellas.
Cristina, la directora, nos explicó que todo parte de una conducta social que muchos años fue totalmente machista, actitud que con el paso de los años se fue modificando. Gracias a esto hoy hay muchos lugares destinados a la contención y ayuda de quienes padecen esta problemática. En el hogar ellas conviven diariamente con casos muy complicados es por esto que su mirada frente a estas cuestiones está muy entrenada y logran identificar actitudes violentas en cualquier momento y situación. La encargada del hogar, Nilda, nos cuenta una de su experiencia….

A continuacon escuchamos las palabras de Cristina, la directora del hogar...
 Esas eran las palabras de dos mujeres que a diario ayudan a combatir esta temática tan difícil que existe en nuestra sociedad.



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